Eduardo Mallea PARA ARGENTINOS
PARA ARGENTINOS
Los argentinos no nos leemos --no nos creemos-- los unos a los otros. Este es un terrible mal nacional. Quizás el más aciago, y de todos, el que del modo más tremendo nos puede traicionar. Lo digo solemnemente. Y hasta que no nos veamos acechados por un gran peligro, no nos daremos cuenta de la seriedad del mal de no habernos creído, de no habernos tenido sacramental confianza recíproca. Los recelos y la reticencia en el juicio sobre lo que los otros piensan o hacen son aquí cada vez más profundos. Y en lugar de ocurrir al revés, esos celos, recelos, regateos, displicencias, malevolencias y desconfianzas van haciéndose peores, en vez de disiparse gradualmente a medida que vamos teniendo una cultura, una ciencia y una técnica, pero sobre todo una cultura, de nivel universal.
(1967)